Select Page

CONJUGACIÓN PERIFRÁSTICA: ES MEJOR TOMAR EL CAMINO LARGO

A veces el rodeo verbal es la mejor opción

Amigos: durante mis andanzas por la práctica del montañismo deportivo, los guías más expertos siempre aconsejaban tratar de tomar el atajo, si ello era posible, debido a la economía de distancia y energía. Norma muy razonable, siempre que el atajo no esté sembrado de abrojos ni hierbas ponzoñosas, ni ponga a los caminantes en peligro de ser emboscados por algún grupo al margen de la ley.

En el hablar de todos los días, sin embargo, no siempre elegimos el atajo. Las razones son diversas: puede ser por desconocimiento de una forma breve para expresar lo mismo, porque puede embellecer la expresión, o porque el camino más largo quizás exprese mejor lo que queremos decir.

Nuestro idioma dispone de varios rodeos que suelen ser muy útiles cuando el camino corto no logra la precisión que buscamos. Estos circunloquios de la expresión se llaman conjugación perifrástica o perífrasis verbal.  La palabra perífrasis viene en primera instancia del griego, y luego, del latín: peri = alrededor y frasis = expresión, frase.

   A.     Tal vez la perífrasis verbal más conocida es la formada por el verbo auxiliar haber + la preposición de + un infinitivo. Ejemplos:

     1. Ha de estudiar.
     2. Has de saber la verdad.
     3. He de amar.
     4. He de ser amada.
     5. Hubo de preparar el festín.
     6. El banquete hubo de ser preparado.
     7. Han de llegar.

Esta perífrasis verbal indica la necesidad de que se realice la acción de marras. Es casi casi una sentencia. Al decir “ha de estudiar”, ponemos de presente que hay un deber imperioso de estudiar. En las oraciones 1., 2., 3., 5. y 7., hemos usado la voz activa, mientras que en las oraciones 4. y 6. hemos usado la voz pasiva. Ambas voces son correctas.

Pero existen otras formas perifrásticas en nuestro idioma. Veamos algunas de ellas:

   B.     Interposición de la conjunción que o de una preposición. Ejemplos: 

   1. Tenemos que trabajar esta noche.
   2. Comienzo a recordar.
   3. Empezó a repetir lo de siempre
   4. Estoy por derrumbarme.
   5. Escribe para no olvidar.
   6. ¿Cuándo dejarás de interrumpirme?
   7. Quedó de avisarnos.

 

   C.     Verbo estar + gerundio, o verbo haber (u otro verbo) + participio pasado. Estamos tan acostumbrados a usar estas perífrasis verbales, que nos parece que no lo son. 

Observemos que en este caso, a diferencia de los anteriores, ninguno de los dos verbos está en infinitivo. Ejemplos:

   1. Estamos divirtiéndonos.
   2. Estuvieron nadando.
   3. Estoy preparándome para el examen.
   4. Hemos dicho que ya todo terminó.
   5. He concluido que no vale la pena.
   6. Dejó redactado el testamento.
   7. Quedó dicho que era un genio.

 

   D.     Con los verbos modales [1]: deber, poder, soler, querer, desear, necesitar, poder, saber, permitir, decidir.  Nuevamente tenemos un caso de verbo (modal) + infinitivo. Ejemplos:

   1. Permíteme visitarte.
   2. Puedo hacer la casa en ocho meses.
   3. ¿Desean modificar la escritura?
   4. Necesitamos celebrar nuestro aniversario.
   5. Sabemos trabajar.
   6. El empleado desea mejorar sus condiciones salariales.
   7. Quisiéramos dar una explicación.

A veces el camino más corto no es el mejor.

Los hablantes nativos usamos todo el tiempo construcciones perifrásticas, casi siempre de manera acertada. Sin embargo, a veces se recurre a ellas más de la cuenta, sobre todo por escrito. Cuando no hay razón para usarlas, el estilo se vuelve ampuloso y pesado. Son muchas las veces en que veo frases del siguiente tenor: “Estudio para poder tener un futuro mejor”. En este caso tenemos dos infinitivos, uno de los cuales es totalmente innecesario. Bien podríamos decir, y con mayor economía: “Estudio para tener un futuro mejor”.

Tampoco caigamos en el otro extremo, que es el de evitar la perífrasis a toda costa, con el argumento de que lo único que importa es la brevedad. Quienes eso piensan, no se dan cuenta de que no es lo mismo decir “Ha de vengarse”, que “Se vengará”. En el primer caso, la expresión tiene más fuerza, e indica algo que necesariamente deberá ocurrir. En el segundo caso, solo se trata de una descripción de un hecho. 

 

[1] Recordemos que los verbos modales son aquellos que no requieren ninguna preposición ni conjunción que los conecte con el verbo que les sigue.

MINUCIAS

“Todos damos un rodeo sin fin”.

Haruki Murakami
(escritor y traductor japonés, 1949)

SABIDURÍA DE SANCHO PANZA

De noche todos los gatos son pardos.

SUSCRÍBETE AL BLOG

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir notificaciones de nuevas entradas.

9 Comments

  1. Alzate

    Gracias, me encanta todo lo que aprendo con tus escritos.

  2. Felipe Azcuénaga

    ¡Definitivamente cada vez me pregunto más qué fue lo que aprendí en el colegio! Gracias por refrescármelo o reenseñármelo.

    • Yilda Ruiz Monroy

      A todos se nos olvida algo por el camino. Gracias.

  3. Yonatan López

    ¡Y yo que siempre había creído que se trataba de un error escribir cosas como los ejemplos que usted da!

      • Luz Stella

        Que Ben aprendizaje el del artículo de hoy, no tenía ni idea que era perífrasis verbal, gracias.

      • Luz Stella

        Que Ben aprendizaje el del artículo de hoy, no tenía ni idea que era perífrasis verbal, gracias.

        • Yilda Ruiz Monroy

          Muchas gracias, querida lectora.

Follow by Email
Twitter
Visit Us
Follow Me
LinkedIn
Share